Se inició en el boxeo con su entrenador de toda la vida, Alberto Zacarías, de la mano de quien realizó una brillante campaña amateur retirándose invicto con 42 peleas ganadas, 26 de ellas por nocaut y un empate.
Debuta profesionalmente el 20 de marzo de 1993 en Marcos Paz, venciendo por abandono a Rito Gamarra y allí inicia una seguidilla de 22 triunfos consecutivos venciendo a Ramon Roque Veron , Oscar Antonio Bogarin, Néstor Fabián Monge, el brasileño Manoel Oliveira da Cruz, Osvaldo Dante Cortés, Gustavo Rodolfo Sayaavedra, el chileno Mario Díaz y Ricardo Omar Vega, entre otros.
Consigue la oportunidad de disputar el título internacional del Consejo Mundial de Boxeo el 16 de abril de 1995, en la ciudad de Smederevo en Servia, perdiendo por puntos ante el local Ljubisa Simic en un fallo extremadamente localista.
Después de vencer a Gustavo Fabián Cuello y a Daniel Leonardo Zielinski, obtiene el título argentino de los livianos venciendo por nocaut técnico a Luis María "Boom Boom" Diez, el 9 de diciembre de 1995 en el estadio de la Federación Argentina de Box en el portenísimo barrio de Almagro.
El 23 de agosto de 1997 en Marcos Paz vence por puntos al recio boxeador chileno Oscar Benavides Muñoz y obtiene los títulos sudamericano y Fedelatin de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB).
El 25 de enero del año 1999 le llega la tan ansiada chance de disputar el título mundial de los livianos de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB), enfrentando al senegalés nacionalizado francés Jean-Baptiste Mendy en el Palacio de los Deportes de París en la Plaza de la Puerta de Versalles En un vergonzoso fallo, los jurados le dan la victoria a Mendy, Sicurella había sido netamente superior al campeón.
El árbitro Oscar Coronel declara ganador a Sicurella en su pelea con el correntino Ramon Roque Veron |
A partir de allí Sicurella ya no fue el mismo, disputó tres combates con Ricardo "Kojak" Silva, ganando dos y perdiendo el restante y se retiró el 10 de agosto del año 2002 tras perder ante el discreto Ariel Olveira.
Se radicó en Madrid, España, donde da clases de boxeo recreativo y trabaja en logística.
Se volvió a casar, es padre de dos niños y vive muy feliz junto a su familia en la capital ibérica.
Ver combatir a Sicurella era un deleite para los ojos y un verdadero revival para los nostalgiosos, un boxeador de magnifica escuela, fino, cerebral, con una gran velocidad de piernas.
Fotos Ramón Cairo
(*) El autor es historiador del tango, escritor, productor cultural.Director del Festival Nacional de tango "Carlos Di Sarli " de Bahía Blanca.
estuve ahi, en Caseros, y para mí los dos tendrian que haber ido a la final, como en FelizDomingo. Sicurella, el más exquisito. Todavia guardo su remera de fina estampa
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